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UN SUPERDOTADO FÍSICO

Raphinha tiene una capacidad para repetir esfuerzos a alta intensidad sin igual. Puede enlazar secuencias ataque-defensa o defensa-ataque sin ningún problema. Y una buena prueba es que es el futbolista más utilizado por Hansi Flick. Y es que no sólo tiene unas condiciones físicas espectaculares de salida, también tiene la valiosa capacidad de sostenerlas durante todos los minutos de todos los partidos. O, lo que es lo mismo, cuando los rivales bajan las prestaciones físicas, él no lo hace. Sus frecuentes desmarques de ruptura pasan de ser muy buenos a ser letales cuando los partidos se abren y las ocasiones que fabrica, a partir de su incansable movilidad, ganan en claridad con el paso de los minutos. El gol que marcó en los octavos de final de la Champions en Da Luz, significó el número 10 que logra más allá del minuto 60 de partido. Un dato descomunal.

PRESIONADOR INIGUALABLE

" Me gusta mucho marcar, me gusta mucho asistir, pero lo que más me gusta es que el equipo gane ". Fue otra de sus frases en la entrevista de Barça One. Unas afirmaciones que Raphinha demuestra en cada partido, trabajando incansablemente en la fase defensiva. La electricidad de sus movimientos hace que salte a la presión muy bien. Lee las trayectorias de pase del rival unas milésimas de segundo antes de que se den y reduce espacios con velocidad. En cuanto a los duelos, es ganador en el 55 % de los que disputa. Un porcentaje muy elevado teniendo en cuenta que es un futbolista de ataque y que, por tanto, muchas de las disputas son en contextos de desventaja. Junto a Sörloth, es el atacante que más duelos gana de los tres grandes de la Liga.

LAS VITAMINAS DEL BRAZALETE

Para complementar el ámbito futbolístico, cabe resaltar la transformación mental de Raphinha. Un factor trascendental para el deporte de primer nivel. El brasileño vuela en el campo porque también vuela en el aspecto mental. Desde el primer día ha sentido la confianza de Hansi Flick. Y esto es básico para que muestre la mejor versión. Pero el principal motivo que explica su salto anímico ha sido el reconocimiento de sus compañeros. Fueron ellos quienes lo escogieron como uno de los capitanes de la plantilla. Y ese detalle, que puede parecer insignificante, no lo es en absoluto. Más bien todo lo contrario. La capitanía le ha inyectado una dosis extra de implicación, responsabilidad y rendimiento.

RAPHINHA