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jóvenes como los más experimentados, y todos quieren aportar.” Ahora hay más energía, más talento por pulir.

Fàbregas lo vive como una parte natural del ciclo. Volver también significa adaptarse.“ No quería fijarme en lo que hicimos o en lo que aporté personalmente. Al final, siempre tienes que adaptarte a un equipo nuevo, a jugadores diferentes, pero con la misma mentalidad y las ganas de ganar todos los títulos posibles.”

JÓVENES Y VETERANOS

El inicio de temporada ha sido positivo, con títulos, pero Fàbregas es directo y toca con los pies en el suelo.“ El pasado es el pasado. Tenemos que mirar adelante y tenemos muchos objetivos por cumplir, esta misma temporada. Así que hay que seguir trabajando, mejorando, si queremos alcanzarlos.”

Una parte clave es el equilibrio entre veteranía y juventud.“ Los jóvenes darán un paso más porque tendrán más experiencia con el grupo, más confianza. Y creo que es tarea de los veteranos ayudarles de la mejor manera para que puedan crecer y, como equipo, ser aún más sólidos.”

Fàbregas vuelve distinto del jugador que se fue.“ Tengo más experiencia, he jugado en una Liga diferente, con una manera de jugar diferente. Ahora el equipo es más joven y yo me he hecho mayor, así que hay que adaptarse y cambiar un poco el rol. He mejorado algunos aspectos, estoy más abierto, intento no estar tan serio, disfrutar más y estar con los demás. Y lo estoy pasando muy bien, la verdad es que en el día a día estoy bastante contento.” Sonríe cuando lo dice, como quien sabe que ha hallado su lugar.

VIDA SENCILLA

Fuera de la pista, su vida es tan sencilla como esencial.“ Tengo un hijo de cuatro años y voy mucho al parque con él. Disfruto de mi familia, para mí es lo más importante. Creo que me da ese equilibrio, esas ganas de seguir trabajando, jugando, mejorando, tanto como jugador, como padre o como pareja.”

La felicidad no la describe con grandes titulares, sino con escenas pequeñas: comprar, pasear, jugar.“ Cosas sencillas del día a día.”

Cuando mira más allá, no se esconde:“ Todo el mundo quiere jugar en el Barça. Yo, por lo que representa Barcelona, el Barça y Catalunya, me gustaría retirarme aquí.” Lo dice con naturalidad, como una consecuencia lógica de lo que siente. Porque para Fàbregas, el Barça no es solo un club de balonmano. Es una forma de vivir. Un lugar donde quiere seguir escribiendo su historia, título a título, día a día.